El cierre del negocio «La Casa de la Empanada» desata polémica por presuntas arbitrariedades en las inspecciones sanitarias y demora en la resolución de sumarios.
El cierre del negocio «La Casa de la Empanada» en Caldera, tras una fiscalización sanitaria, ha generado indignación entre emprendedores locales. Su dueño, Osvaldo, calificó la medida como «arbitraria», asegurando que ha cumplido con la mayoría de los requisitos exigidos, pero sigue enfrentando sanciones «desproporcionadas» y una falta de claridad en los criterios aplicados.
«Cumplo con el 90% o más, pero igual me sancionan como si fuera una falta total. ¿Acaso hay una categoría distinta para pequeños empresarios?», cuestionó Osvaldo, quien además destacó su contribución a la comunidad a través de la generación de empleo y la formación de jóvenes. También denunció que hay sumarios pendientes por más de dos años que no han sido resueltos por la autoridad sanitaria, lo que demuestra una falta de coordinación y criterio en las fiscalizaciones.
La diputada por Atacama, Sofía Cid, respaldó la denuncia de Osvaldo y criticó el trato desigual en las inspecciones. «No es justo que quienes generan empleo y desarrollo en nuestra región enfrenten fiscalizaciones tan estrictas, mientras en otros casos el control parece mucho más laxo. Esto genera una enorme desigualdad», afirmó.
Cid aseguró que se ha contactado con las autoridades sanitarias para buscar respuestas, pero que hasta ahora no ha obtenido información clara sobre el caso. Ante esta falta de transparencia, anunció que llevará a Osvaldo a la Comisión de Economía y Salud en el Parlamento, con el objetivo de exponer su caso y generar cambios en los procedimientos de fiscalización.
«Queremos que Osvaldo exponga directamente su caso a los parlamentarios, para que se comprenda la gravedad de estos problemas y lo arbitrario de estas situaciones. Es necesario que las autoridades conozcan de primera mano lo que enfrentan los emprendedores», agregó la parlamentaria.
La diputada también resaltó la importancia de las PYMEs en la economía regional, señalando que no se puede permitir que la burocracia y la falta de criterios claros terminen asfixiando a quienes generan trabajo y desarrollo en Atacama.
Finalmente, Cid hizo un llamado a revisar los procesos de fiscalización, asegurando que si bien las normas sanitarias son fundamentales, deben aplicarse de manera justa y con oportunidades de mejora antes de tomar decisiones drásticas como el cierre de un negocio.
«Los emprendedores de Atacama no están solos. Vamos a seguir trabajando por una región más justa y con más oportunidades», concluyó la diputada.