El ministro de Educación, Nicolás Cataldo, aseguró que la implementación de los nuevos Servicios Locales de Educación Pública (SLEP) evitará problemas como los registrados en Atacama, gracias a un proceso más planificado y supervisado.
El 1 de enero de 2025, nueve nuevos Servicios Locales de Educación Pública (SLEP) comenzaron a operar en Chile, administrando más de 900 establecimientos educativos y reemplazando la gestión de 46 municipios. Con este avance, ya están funcionando 24 SLEP en el país, como parte del proceso de desmunicipalización que finalizará en 2030 con 70 servicios activos.
El SLEP de Atacama marcó un precedente negativo en el proceso de desmunicipalización. Durante su implementación, problemas graves de infraestructura y deudas dejaron a estudiantes de comunas como Copiapó sin clases por hasta 80 días, generando gran preocupación entre comunidades educativas y autoridades. Este caso se convirtió en un ejemplo de los desafíos que enfrentan los SLEP cuando no se implementan con la planificación adecuada.
El ministro de Educación, Nicolás Cataldo, reconoció las dificultades enfrentadas en Atacama, pero aseguró que los nuevos SLEP están siendo implementados bajo mejores condiciones. «Es altamente improbable que se repita un caso como el de Atacama. Este traspaso se está trabajando con más tiempo, profundidad administrativa y controles estrictos, siguiendo recomendaciones de Contraloría,» afirmó.
Cataldo destacó que el proceso actual incorpora aprendizajes del caso Atacama. Las recomendaciones de Contraloría se han aplicado para reforzar la supervisión de los SLEP, la Dirección de Educación Pública y el Ministerio de Educación, asegurando un enfoque más riguroso en los aspectos administrativos y financieros.
«Siempre en el sistema educativo hay dificultades, pero estamos adoptando medidas para prevenir escenarios críticos como el de Atacama. Además, contamos con más tiempo para planificar y ejecutar este traspaso, asegurando un inicio más estable para los nuevos servicios,» explicó el ministro.
A pesar de las mejoras en el proceso, desde el mundo docente y las alcaldías persisten inquietudes. El presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, señaló: «El caso de Atacama fue un extremo, pero otros SLEP también enfrentaron problemas. Hemos alertado a las autoridades sobre las dificultades de implementación, que deben ser abordadas con prioridad.»
Por su parte, el académico de la Universidad de Santiago, Mario Sobarzo, opinó: «El diseño de los SLEP presenta fallas estructurales, ya que la gestión no es uniforme y los resultados han sido desiguales. Esto va en contra del objetivo de crear un sistema centralizado y equitativo.»
El sistema de los SLEP incluye un mecanismo para abordar las deudas previas al traspaso de administración. Estas se identifican, se asignan a los beneficiarios y se pagan con autorización de la Dirección de Presupuestos, descontando los montos correspondientes del presupuesto municipal.
El caso Atacama, aunque crítico, sirvió como experiencia clave para fortalecer el diseño e implementación de los nuevos SLEP. El ministro Cataldo subrayó que este proceso busca garantizar una transición más eficiente, evitando que otros servicios enfrenten problemas similares.