El organismo asegura estar tomando medidas correctivas luego del informe de Contraloría que reveló deficiencias en la gestión de recursos públicos.
El Fondo Nacional de Salud (Fonasa) enfrenta cuestionamientos tras la detección de irregularidades financieras en sus estados financieros entre 2016 y 2022. Según un informe de la Contraloría General de la República, Fonasa presenta una deuda no financiada de al menos $336.128 millones, producto de un déficit en los recursos disponibles para cubrir sus obligaciones.
En respuesta al informe, Fonasa reconoció las observaciones realizadas y anunció la implementación de diversas medidas para subsanar las deficiencias detectadas. Entre estas acciones destaca la actualización de sus sistemas financieros para reflejar con precisión las deudas pendientes, especialmente las relacionadas con devoluciones de licencias médicas a servicios públicos. Asimismo, se han reforzado los controles internos con el objetivo de garantizar una gestión eficiente de los recursos.
El organismo también ha instruido la realización de sumarios administrativos para determinar responsabilidades internas en las irregularidades detectadas. Paralelamente, se ha establecido una mesa de trabajo con la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso) y las Comisiones de Medicina Preventiva e Invalidez (Compin), buscando mejorar la coordinación en la gestión y monitoreo de licencias médicas.
El informe de Contraloría señaló que la falta de controles adecuados permitió la acumulación de deudas y afectó la capacidad de Fonasa para gestionar eficazmente sus obligaciones financieras. Entre las deficiencias más graves se encuentran pagos irregulares en licencias médicas, multas y cobros no ajustados a procedimientos legales, además de problemas de conciliación bancaria que dificultan la transparencia en el uso de los recursos públicos.
Desde Fonasa subrayaron su compromiso con la transparencia y destacaron que las acciones implementadas buscan prevenir la repetición de estas situaciones, además de garantizar la calidad de los servicios ofrecidos a los beneficiarios del sistema de salud público.
Las irregularidades detectadas han generado preocupación tanto en la ciudadanía como en expertos en políticas públicas, quienes han enfatizado la importancia de un manejo más riguroso de los recursos en el sistema de salud, especialmente en un contexto de alta demanda por servicios de calidad. Fonasa continuará avanzando en las acciones requeridas por la Contraloría mientras realiza investigaciones internas, con el objetivo de recuperar la confianza de los usuarios y de la opinión pública.