Las asociaciones gremiales de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) dieron por finalizadas sus movilizaciones tras alcanzar un acuerdo con el Gobierno para la implementación de un bono universal que beneficiará a los trabajadores del sector. Este pacto pone fin a días de paralizaciones y ralentización de servicios en aeropuertos clave del país, incluidos el Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez.
La movilización comenzó debido a la exclusión de un bono de fiscalización en el presupuesto 2025, a pesar de haber sido acordado previamente en mayo de 2024. Los trabajadores de la DGAC exigían el cumplimiento de lo pactado, lo que llevó a una serie de acciones que incluyeron la ralentización de operaciones en los aeropuertos, generando retrasos y afectando a miles de pasajeros.
El paro incluyó a controladores aéreos, personal de seguridad aeroportuaria, meteorólogos, instrumentistas, personal administrativo y auxiliares, quienes demandaban medidas concretas para mejorar sus condiciones laborales.
El Gobierno y las asociaciones gremiales llegaron a un entendimiento que contempla la entrega de un bono universal y permanente para todos los trabajadores de la DGAC. Este beneficio busca reconocer la labor fundamental que desempeñan en la fiscalización y el control del espacio aéreo chileno.
Con este acuerdo, se normalizaron las operaciones aeroportuarias y se garantizó la continuidad de los servicios, permitiendo el regreso a la normalidad en los principales terminales aéreos del país.
Las autoridades destacaron la relevancia del diálogo para resolver este tipo de conflictos laborales. «Este acuerdo representa un avance en la valoración de los trabajadores de la DGAC y su rol esencial para la seguridad y la operatividad de los aeropuertos del país», señalaron desde el Ministerio de Transportes.
Por su parte, representantes gremiales calificaron el acuerdo como un logro para los trabajadores y agradecieron el respaldo recibido por los funcionarios movilizados y la comprensión de los pasajeros afectados.
La movilización de la DGAC se suma a una serie de protestas laborales que han marcado el debate en torno al Presupuesto 2025. Este caso evidencia la importancia de atender las demandas de los trabajadores en sectores críticos para el país y de establecer acuerdos que aseguren la estabilidad laboral y operativa en servicios esenciales como la aeronáutica.