El pasado 3 de octubre de 2024, se llevó a cabo en Copiapó una nueva Comisión Coordinadora Regional contra la Explotación Sexual de Niños, Niñas y Adolescentes (ESNNA), liderada por Verónica Rivera, seremi de Desarrollo Social, y César Guzmán, director del Servicio de Protección a la Niñez. Pilar Medina, de la Defensoría de Niñez, destacó la necesidad de fortalecer la coordinación interinstitucional y endurecer penas para los responsables de explotación infantil. Guzmán advirtió sobre el avance del fenómeno, subrayando que «es tarea de todos detener este flagelo».
Esta semana, bajo la coordinación del Servicio Regional de Protección a la Niñez, se realizó una nueva reunión de la Comisión Coordinadora Regional para abordar el preocupante fenómeno de la explotación sexual infantil (ESNNA). Encabezada por la seremi de Desarrollo Social y Familia, Verónica Rivera, y el director del Servicio, César Guzmán, la comisión reunió a representantes de diversas entidades, como Carabineros, Sernatur, Salud, y Educación, quienes concluyeron que no existen suficientes instancias regionales que coordinen eficazmente la fiscalización y protección de menores frente a este tipo de delitos.
Pilar Medina, coordinadora de la Sede Regional de la Defensoría de Niñez, detalló que uno de los principales problemas radica en la invisibilización del fenómeno, lo que limita la implementación de acciones penales efectivas. En su intervención, la Defensoría de la Niñez expuso la importancia de reconocer que los menores no son prestadores de servicios, sino víctimas. «Debemos endurecer penas para los adultos que ejercen la explotación infantil», afirmó Medina.
Otro punto crítico expuesto fue la falta de personal policial especializado para investigar estos delitos. También se identificaron factores de riesgo, como el aumento de población flotante y el consumo de sustancias, lo que agrava la situación en la región de Atacama.
César Guzmán, director del Servicio de Protección a la Niñez, hizo un llamado a la sociedad a tomar acción y reconocer la gravedad de este fenómeno: “Los adultos podemos detener este flagelo que deja huellas imborrables en nuestros niños, niñas y adolescentes. Trabajar con turismo, trabajo, economía y otros servicios del Estado es fundamental para lograrlo”.