Tras el reciente balance hidrológico emitido por el Ministerio de Obras Públicas (MOP), que evaluó las principales cuencas desde el río Copiapó hasta el río Itata destaca el río Huasco por su situación auspiciosa, lo que permite a la Junta de Vigilancia de la Cuenca del Río Huasco y sus Afluentes (JVRH) proyectar condiciones favorables para la temporada de riego 2024-2025, gracias a la eficiente gestión y administración del recurso hídrico en la zona.
Juan Pablo Espinosa, presidente de la Organización de Usuarios de Aguas (OUA), recalcó que “la importancia del balance hidrológico del MOP señala que contamos con una disponibilidad hídrica considerable en la cuenca de los ríos Huasco y Copiapó. Para el Huasco, los pronósticos están en torno a los 31 Mm3, lo que nos permite proyectar una buena temporada de riego. Esta disponibilidad, según lo informado por la Dirección General de Aguas (DGA), nos permitirá administrar de manera más efectiva los recursos disponibles”.
En cuanto al Embalse Santa Juana, Víctor González, gerente general de la JVRH, detalló que “actualmente, el embalse se encuentra con un 54% de su capacidad hídrica disponible. Este nivel de reserva se debe al esfuerzo conjunto de todos los usuarios de la cuenca, quienes han sabido adaptarse a las difíciles condiciones impuestas por el cambio climático y la sequía prolongada. Además, contamos con reservas en las Lagunas Cordilleranas, lo que nos coloca en una mejor posición para enfrentar la temporada, sumado a la óptima administración del recurso hídrico que lleva a cabo la JVRH”.
González también destacó el sistema de distribución hídrica de la cuenca: “El modelo de gestión que utilizamos en la cuenca del río Huasco permite ahorrar agua y establecer dotaciones anuales, dejando reservas para años posteriores, lo que es crucial y estratégico para afrontar eventos de escasez”.
Por su parte, Cecilia Anacona, secretaria de la JVRH, hizo un llamado a los usuarios de aguas de la cuenca a “mantener los canales limpios, las compuertas en buenas condiciones y, sobre todo, respetar los turnos de riego establecidos. Estas medidas son fundamentales para asegurar la disponibilidad de agua en los canales a lo largo de la temporada de riego, especialmente en tiempos de escasez”.
Con el actual modelo operacional y un trabajo colaborativo entre los usuarios, la cuenca del Huasco se prepara para una temporada de riego que, aunque marcada por la escasez hídrica, está dotada para enfrentar el desafío de manera óptima y eficiente.