– Si se pudiera resumir en breves palabras el mensaje central del primer Kiwi Day “Calidad, Calidad y Sabor” serían perfectas, pues los temas abordados en la jornada permitieron definir las futuras tareas del sector, centradas en seguir avanzando en la calidad y consistencia de kiwi verde, potenciar el trabajo en nuevas variedades y trabajar con foco en el consumidor final
21 de agosto de 2024.- Ayer se realizó el primer Kiwi Day, evento organizado por el Comité del Kiwi y RedAgrícola y que convocó a cerca de 500 productores y exportadores de esta fruta. El evento permitió analizar aquellos desafíos en calidad que tiene el frutal, tanto a nivel productivo, como en lo varietal y comercial con miras a la sustentabilidad del sector.
Luego de la pandemia del Covid-19, el kiwi se ha posicionado como una superfruta dados sus atributos para la salud y la nutrición de las personas, como por ejemplo, su alto contenido de vitamina C, incluso sobrepasando en esas materias a otras frutas. Ese hecho, sumado a un escenario de menor producción y a un trabajo encabezado por el Comité del Kiwi (PAM) que ha permitido mejorar la calidad del kiwi chileno, han permitido obtener mejores resultados. Pero la industria, según lo analizado en el Kiwi Day, debe ir más allá y potenciar el trabajo para entregar un kiwi exquisito y estéticamente atractivo a los mercados y consumidores.
Al respecto, Carlos Cruzat, presidente del Comité del Kiwi, puntualizó: “La industria tiene un gran desafío en el kiwi verde, que consiste en convertirse en un proveedor de fruta de calidad que permita competir mejor a nivel mundial. Tenemos a Nueva Zelanda que ofrece un producto muy bueno, que va aumentando su oferta de kiwis amarillos y disminuyendo en verde. Los europeos cosechan más tarde y llegan en buenas condiciones, por lo tanto, tenemos que trabajar para entregar un gran producto. Y eso es lo que hemos estado discutiendo en este primer Kiwi Day, junto con definir la responsabilidad del productor para lograr ese gran producto, y el trabajo en poscosecha que debemos realizar para potenciar los atributos de ese gran producto. Todos estos esfuerzos nos permitirán dejar al consumidor final satisfecho y con ganas de volver a comprar nuestros kiwis. De esta forma, lograremos un reconocimiento que nos permita estar presentes, de manera permanentemente, en la demanda de los supermercados y los consumidores de Hayward”.
“Si queremos ser exitosos en kiwi Hayward, que es el que tenemos, debemos centrar nuestro trabajo pensando en los consumidores, los cuales son más que un estereotipo; son mercados, son países, son grupos de personas, son los deportistas, distintos unos de otros, pero son quienes finalmente pagan la cuenta, compran lo que los satisface y dejan de adquirir aquello que no lo hace. Por lo tanto, hay que tener un kiwi Hayward de buena calidad”.
En cuanto a las nuevas variedades, Cruzat indicó: “Ahí tenemos un desafío más complejo, el cual, tiene que ver con todas las dificultades que hemos enfrentado para mantener las plantaciones exitosamente. Llevamos 20 años probando nuevas variedades, por lo que, para avanzar en enfrentar este problema tenemos que trabajar en conjunto. Lo que viene ahora es que compartamos esa información y que nos preparemos para que esas nuevas variedades lleguen a ser exitosas”.
Consumidor y Promociones
El Covid-19 significó un cambio en los hábitos de los consumidores, gran parte de ello, influenciado por las redes sociales.
En ese sentido, Ignacio Caballero, director de Marketing de Frutas de Chile, comentó: “Tenemos que entender al consumidor y entender dónde se informan para buscar un producto; lo digital revolucionó la forma de consumo de la gente, y ahí la fruta tiene una oportunidad, por sus ventajas nutricionales”.
En dicho sentido explicó que el mundo de las redes sociales abrió una gran oportunidad para abordar a los diferentes tipos de consumidores, los cuales han hecho de las redes sociales su herramienta preferida para comprar, buscar productos y enterarse de nuevos. Explicó que las generaciones Z y Millennials lideran el uso de las redes sociales para dichos fines con un 48 y 47 por ciento, respectivamente. Mientras que las generaciones X y Babay Boomers hacen uso de ellas (RRSS) en un 37 y 24%, respectivamente.
“El kiwi, a diferencia de otras frutas, es un producto de gusto de los jóvenes, de las nuevas generaciones, especialmente dados sus atributos para la salud, por ello, las redes sociales son un medio clave para seguir potenciando el conocimiento y consumo de kiwis”, agregó Caballero.
Asimismo, el profesional destacó la importancia de mantener y potenciar las acciones de promoción, detallando que Chile invierte alrededor de 390 mil dólares en la promoción de kiwis en los mercados de EEUU, India, México y Brasil, definidos como estratégicos por la industria. Al respecto, dijo que si bien el monto es bueno y ha permitido realizar acciones, no sería suficiente si se compara con lo que invierte, por ejemplo, Zespri, cuya inversión en promoción supera los 100 millones de dólares.
Escenario mundial y Nacional del Kiwi
Jean Baptiste Pinel, director general de Primland Francia, fue el encargado de analizar la situación mundial del kiwi, destacando el escenario de la caída mundial en la producción de kiwis, lo cual, abre oportunidades, pero también desafíos para el kiwi chileno. “El producto se está valorizando por la baja producción en algunas zonas y porque es complicado de producir. Aunque algunos consumidores ya lo están considerando caro (Europa), y es el consumidor el que pone las reglas del juego”.
El ejecutivo francés destacó que “Chile ha tomado una buena decisión de luchar por no cosechar fruta temprana, para acumular más brix, lo cual, es lo adecuado. Sé que es más atractivo cosechar temprano porque puedes conseguir mejores precios, pero el consumidor no volverá por un mal kiwi”.
Asimismo, el profesional, relevó que Chile puede aprovechar la oportunidad de convertirse en un referente en kiwis verdes, pero sólo “será posible con un kiwi verde muy bueno”. Añadió que, Chile, junto con avanzar en kiwi verde, no debería abandonar la idea de contar con una mayor variedad varietal. “Chile, debe sí o sí explorar nuevas variedades, sobre todo en kiwi amarillo, ya que, el mundo va para allá”, aseguró.
“Es clave que la industria chilena del kiwi se ponga de acuerdo en reglas comunes para poder obtener una buena fruta, con un buen gusto y cuidando la manera de producir kilos por hectárea, los grados brix, materia seca y sólidos solubles. Todo esos criterios los conocemos pero hay que ponernos de acuerdo para que la industria produzca una fruta con esas características”, puntualizó.
Por su parte, Álvaro Herreros, sub gerente Garcés Fruit, también destacó que tanto Chile y Nueva Zelanda, en el hemisferio sur, han caído en producción, relevando que se han sumado jugadores que pueden competir con Chile, como Irán, por lo tanto, los esfuerzos por mejorar no se pueden parar, sino que intensificar.
En ese contexto, Herreros comentó que en Chile “tenemos un kiwi desmejorado, y competimos con otras frutas que han mejorado mucho en calidad, y si no mejoramos, los consumidores van a privilegiar otros kiwis u otras frutas”,
Al mismo tiempo, el profesional llamó a cambiar la visión cortoplacista del sector que no permite focalizar los esfuerzos .”La industria tiene una mirada cortoplacista del kiwi, donde por ejemplo no sabemos qué quiere el cliente de Brasil u otros mercados. Estamos tan ocupados persiguiendo clientes, que no estamos construyendo marca. No estamos escuchando las necesidades reales de los consumidores y tampoco estamos transmitiendo esas necesidades a los productores para desarrollar esta fruta”, observó.
Por ello, y pensando en cómo Chile proyecta su industria para los próximos años, aprovechando las últimas campañas de bonanza, Herreros aseguró que “el momento de invertir es hoy, porque vamos a competir con más kiwis verdes y amarillos. Necesitamos renovar la industria ahora, y no lamentarnos después sin saber qué hacer. Tenemos que tener la mejor fruta posible, bien construida en el campo, porque el packing no es un hospital”.
Experiencia Neozelandesa y Poscosecha
¿Es posible replicar la experiencia neozelandesa en Chile? Esa fue la pregunta que buscaron responder las expertas en poscosecha María Paz Márquez (Greenvic) y Graciela Valdés (David del Curto), durante su presentación y basadas en la visita coordinada por el Comité del Kiwi a Zespri,y en la cual participaron socios del Comité.
Al respecto, Márquez describió algunos puntos que diferencian a ambas industrias: “En Nueva Zelanda los productores tienen en promedio 3,8 hectáreas de kiwi, en comparación con Chile, donde los productores cuentan con un promedio de 14,3 hectáreas. En Nueva Zelanda el productor es pequeño pero especialista en kiwi, se dedica solo a este cultivo, a diferencia de Chile, donde los productores también tienen otras especies”.
Valdés complementó esto señalando que “ante la heterogeneidad de nuestra materia prima (en Chile), tenemos que ser muy cuidadosos, porque el kiwi verde ha ido perdiendo terreno sobre el amarillo, por lo que va a haber menos opción de venta. Si trabajáramos con una materia prima más homogénea, podríamos tener más simpleza en todos nuestros procesos”.
Las profesionales concordaron en que la industria nacional puede tomar ciertas prácticas neozelandesas, simplificando algunos procesos, como por ejemplo el envasado, pero para ello se debe avanzar en mejorar la calidad, consistencia y cosmética de la fruta.
Uno de los principales referentes en poscosecha de Chile, el Dr. Juan Pablo Zoffoli, también abordó los principales desafíos que presenta este frutal en Chile, poniendo su foco en la desincronización que presenta la madurez del kiwi con la dureza de su columela. Indicando que no hay una conversación entre la madurez de cosecha y la madurez de consumo.
El investigador al hablar de la calidad de la fruta y su manejo, dijo que enfrentar la tarea es “un tema cultural, porque necesitamos integrarnos para que todos entendamos que esto se hace en conjunto. Estamos de acuerdo en que queremos una fruta para que el consumidor pueda cucharear, entonces necesitamos que tenga materia seca y que se ablande”.
Asimismo, Zoffoli, observó que en beneficio de la mejora del kiwi, sería “más importante pagar a los productores por materia seca que por calibre. ¿Quién en la cadena productiva es responsable de que esa materia seca se exprese? El manejo de poscosecha”, relevó.
Investigaciones y Desarrollos en beneficio del sector
Durante el evento se dio a conocer a la industria la nueva “Plataforma de Gestión del Kiwi del Comité del Kiwi”, un servicio gratuito para los socios de la entidad que integra información crítica para la toma de decisiones de los productores y exportadores.
Elizabeth Köhler, asesora técnica del Comité del Kiwi, señaló que esta herramienta es “un lugar donde es posible acceder a toda la información estandarizada y validada para productores, exportadores, asesores y profesionales del sector”. Incluye también el programa de monitoreo de huertos, el programa de aseguramiento de huertos, el Kiwi Report, y los documentos con información técnica disponible.
Además, se abordó la posibilidad de producir nueva genética en el país. Al respecto, Cherie Méndez, supervisora de gestión de proyectos del Comité del Kiwi, entregó resultados del proyecto Corfo “Protocolos y metodologías de selección para el establecimiento de material genético de Actinidia sp. destinado a uso comercial en Chile”.
Las variedades nuevas no han tenido buenos resultados en Chile, señaló, problema que enfrenta este proyecto para ofrecer a la producción nacional alternativas a la predominante variedad verde Hayward. Las recomendaciones, ya se encuentran disponibles en una publicación del Comité que quedará publicada en su sitio web.
Sobre la posibilidad de adoptar nuevas variedades en el país, el reconocido asesor Jordi Casas, director técnico de Caducos, comentó que “el desarrollo de nuevas variedades nos va a llegar sí o sí. Lo mismo nos pasó con manzanas y carozos, y hoy tenemos algunos años para estar pendiente de las nuevas variedades, donde tenemos que aunar esfuerzos para conocerlas, en variedades verdes pero tampoco dejar de lado las amarillas ni las rojas”.
Casas concluyó que “como industria tenemos que llevarlo en conjunto, con variedades desarrolladas antes de entregarlas a los productores”
Finalmente se destaca que en el evento se desarrollaron dos paneles de discusión, donde se abrió la oportunidad de profundizar los temas de las exposiciones.