Más de 2 millones de estudiantes –desde prebásica hasta la educación de adultos– se alimentan diariamente a través del Programa de Alimentación Escolar (PAE), de Junaeb, que entrega más de 3,6 millones de raciones al día –incluyendo desayunos, almuerzos, onces, colaciones y cenas– en más 12 mil establecimientos educacionales de todo el país.
Este programa ha sido reconocido por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), por su aporte para terminar con el hambre en el mundo; y por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de Naciones Unidas, que lo destacó como uno de los mejores a nivel internacional, solicitándole ser el fundador de la Red Latinoamericana de Alimentación Escolar.
Pero pese a su indiscutido aporte a la nutrición en el país, hay algunas preparaciones que no son tan aceptadas entre los estudiantes. Para mejorar esta situación, Junaeb desarrolló una particular estrategia: durante 2022 realizó degustaciones de sus principales platos entre escolares, apoderados y profesores de seis regiones del país (Arica, Antofagasta, Atacama, Metropolitana, Ñuble y Los Lagos), para testear qué tan apetecidos eran.
En las degustaciones se probaron 115 preparaciones, que fueron evaluadas con un test de percepción en formato digital, lo que permitió conocer en detalle la opinión de la comunidad educativa sobre los platos. Algunas de las preparaciones mejor evaluadas (con sobre un 80% de aceptabilidad) fueron las croquetas de pescado, el tomaticán, el huevo revuelto con tomate y la carne salteada, entre otras. (Ver tabla completa al final)
Se elimina el huevo en polvo y el agua saborizada con pepino
Esta información se tomó en cuenta para realizar ajustes en las preparaciones que componen las minutas de Junaeb. Así, se eliminaron combinaciones poco aceptadas por los estudiantes, como la leche con fruta, el huevo solo y el huevo en polvo; y se aumentaron los productos con mayor aceptación, como la leche con pan y agregados, o yogurt con cereal.
En el desayuno, por ejemplo, se aumenta la frecuencia del pan y se incluyen agregados salados como jamón de pavo, tomate, queso o quesillo y huevo. En el almuerzo, hay más ensaladas en base a hoja y tomates, que son más aceptadas. En el plato de fondo, en la nueva licitación –que incluye a las regiones de Coquimbo, Araucanía, Magallanes y siete comunas de la RM– se incorporan algas y mariscos. Junaeb también insta a las empresas prestadoras a incluir preparaciones más caseras como charquicán con huevo, churrasco con puré, guisos de lentejas, porotos con tallarines y espagueti. Y en el postre, se agrega el yogurt, la jalea y los postres de leche caseros.
También se elimina el agua saborizada con rodajas de limón, naranja o pepinos, debido a que no era tan aceptada, y hoy se entrega agua sin sabor, que es bien valorada por los estudiantes. En la licitación 2023 también se incluyen alimentos aptos para alumnos con intolerancias y alergias alimentarias, y se programa un menú diario semanal en base a plantas, entre otras medidas.
