El Delegado Presidencial, Patricio Urquieta, en compañía del Senador Rafael Prohens, el Seremi de Agricultura, Patricio Araya; el Director de Sernatur, Alejandro Martín, el Consejero Regional, Roberto Alegría y el Investigador Académico de la Universidad de Atacama, Roberto Contreras, anunció un proyecto piloto de riego en espacios acotados en la planicie del desierto, que sea de fácil acceso y visibilidad para la comunidad, y que evidencien la posibilidad de contar con el desierto florido todos los años entre los meses de agosto y septiembre.
En la instancia, el Delegado Presidencial, Patricio Urquieta, señaló que “Queremos impulsar una iniciativa piloto que nos permita tener la oportunidad de vivir la experiencia del desierto florido todos los años, y aprovechar mejor el potencial de este tesoro natural de Atacama para impulsar el desarrollo de la ciencia y el turismo en nuestra región. Este proyecto será liderado por el Ministerio de Agricultura a través de CONAF, involucrando a diversas reparticiones públicas, que serán clave para el adecuado aprovechamiento de este espacio. El costo aproximado es de 40 millones de pesos para 3 hectáreas, contempla un sistema de riego, y un suministro de agua medido en su cantidad y que sea se similares condiciones al agua de las precipitaciones que podrían existir. Esto lo tenemos planificado para el segundo trimestre del año 2022”.
Asimismo, Urquieta señaló que “Lo vamos a realizar en 3 sectores, de una hectárea cada uno, y la definición de esos sectores considerará un análisis sobre la diversidad de especies, el mejor posicionamiento para instalar el sistema de riego, la seguridad de las instalaciones y su mejor acceso y visibilidad por las personas que deseen conocer este tesoro natural de Atacama. Durante muchos años se ha conversado por los mismos protagonistas de la exhibición del desierto florido, como es el caso del consejero regional Roberto Alegría, sobre el interés turístico permanente tanto del ámbito nacional como del extranjero por ver este fenómeno único en el mundo, y siempre esperamos que el clima nos acompañe. Esta vez queremos hacer que las cosas ocurran, y no depender de que ocurran por sí solas”.
Cabe destacar que existe un interés científico en conocer mejor las cualidades de las semillas, su estructura, su adn, que les permite sobrevivir en esas particulares condiciones desérticas y de escasez de agua, cuyos resultados podrían transformar la agricultura nacional y el uso del suelo fiscal en un contexto de cambio climático y escasez hídrica.
En tanto, el Consejero Regional y profesor de Ciencias Naturales, Roberto Alegría, dijo que “Este es un sueño de muchos años. Creo que es un plan piloto que va a trascender y nos va a permitir explotar turísticamente nuestra región. Eso va a significar que tanto los turistas como a los extranjeros, y los científicos puedan planificar un viaje a Atacama para conocer esta maravilla que tenemos escondida bajo tierra. Nosotros aquí tenemos un tesoro oculto y queremos explotarlo, estudiando mucho más, porque creo que aquí las semillas nos dan una señal de que pueden sobrevivir muchos años sin agua”.
Por su parte, el Seremi de Agricultura, Patricio Araya, señaló “Como Ministerio de Agricultura estamos muy contentos de poder participar en este programa piloto, porque podemos ver que tenemos un patrimonio biológico muy importante y único en el mundo. Entonces lo que queremos es que este patrimonio pueda expresarse todos los años en forma adecuada”.
Roberto Contreras, Investigador Académico de la Universidad de Atacama, manifestó “El aporte que queremos realizar es aprovechar la experiencia que se va a desarrollar para hacer estudios científicos. Detrás de esto va a ir un equipo que hemos comentado con el Delegado Presidencial para que pueda ser un aporte. Esos estudios científicos van a ayudar a tener una línea base del comportamiento del Desierto Florido”.
Finalmente, Alejandro Martin, Director de Sernatur, Alejandro Martin, dijo “Este es un programa piloto a través del cual se puede generar un tremendo cambio en el desarrollo turístico de la región. Es una evaluación que se va a hacer año a año porque queremos ver la posibilidad de no depender siempre del clima, sino de hacer que las cosas vayan sucediendo en términos turísticos. Necesitamos poder programarnos y poder proyectarnos, y si queremos tener el desierto florido como un atractivo natural de carácter internacional, tiene que haber la posibilidad también de poder proyectarlo. Este es un programa acotado que no va a intervenir la naturalidad del desierto florido, sino que va a permitir que los años que el desierto florido tenga menor intensidad, las personas también cumplan sus expectativas desde el punto de vista del viaje de turismo y puedan vivir esta experiencia”.