En un escenario de aumento del 1,5 °C global, en esa zona del país el incremento sería más cercano a 2 °C. El panorama es aún más crítico en el hemisferio norte, proyectándose un alza de 3 °C en Canadá y de 4 °C en Rusia.
Una de las conclusiones más alarmantes del último informe elaborado por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático es que el calentamiento global es peor y más rápido de lo que se esperaba. Las emisiones de gases de efecto invernadero ya han provocado un calentamiento del planeta de 1,1 ºC desde la época preindustrial, y se proyecta que en los próximos 20 años –diez años antes de lo estimado– se alcance o supere los 1,5 ºC de calentamiento, con riesgos de desastres «sin precedentes» para la humanidad.
El informe –que se basa en el conjunto de datos recogidos por todos los científicos del mundo dedicados a observar el clima– afirma que en las décadas venideras los cambios en el clima se intensificarán en todas las regiones del mundo. No obstante, explica que si bien muchos cambios en el clima dependen directamente del calentamiento global, lo que las personas y las regiones efectivamente experimentan es muy diferente de ese promedio.
Así, por ejemplo, el calentamiento de la superficie terrestre es mayor que el promedio del planeta y en el Ártico es hasta dos veces superior. Solo en la zona austral y mar de Chile el alza sería inferior al promedio Para explorar la información a nivel regional, el Grupo Intergubernamental desarrolló un Atlas interactivo.
Al navegar por dicho atlas se puede observar, por ejemplo, que en un escenario de calentamiento global de 1,5°C, el alza de la temperatura media anual en la zona central de Chile estaría por sobre esa cifra, acercándose más a los 2°C. Mientras que en el norte del país ésta alcanzaría o superaría los 2 °C. En la zona sur de Chile estaría en torno a 1,5°C y solo en las regiones más australes el alza podría ser inferior a esa cifra, más cercana a 1°C.
En el mar de Chile el alza de la temperatura también sería más cercana a 1 °C. No obstante, en la Antártica chilena el incremento estaría en torno a 2 °C o incluso más, por ejemplo en zonas como la península antártica.
En el resto de Sudamérica, en países como Brasil, Colombia, Venezuela y Perú, el alza también sería mayor al promedio global, ubicándose en torno a los 2°C o superando esa cifra. El escenario sería aún más desfavorable en el hemisferio norte. Con un calentamiento global de 1,5 °C, en Estados Unidos, Europa y el norte de África se proyecta un alza de 2 °C o superior.
Mientras que en Canadá, Groenlandia y los países escandinavos estaría en torno a los 3 °C; y en el norte de Rusia se empinaría hasta los 4 °C, superando los 5 °C en el Ártico. Los científicos proyectan que, con un aumento de 1,5 °C, habrá más olas de calor, las estaciones cálidas serán más largas y las frías más cortas; y con un aumento de 2 °C, los eventos extremos de calor serán más frecuentes y se llegará a niveles de tolerancia crítica para la salud y la agricultura.