Hasta un supermercado del centro de Copiapó llegó el Seremi de Salud de la Región de Atacama, doctor Pedro Lagos, junto a un equipo de funcionarios de la misma secretaría, para fiscalizar el estado de las carnes que se ofrecen en el comercio local, más aún, luego que la Policía Federal de Brasil descubriera en ese país, evidencia de adulteración en la información y producción de carne para su consumo interno y también para la exportación de este producto.
Según datos, entregados por el Ministro de Agricultura Carlos Furche, el 50% de la carne que se consume en Chile es importada, de la cual un 30% proviene precisamente de Brasil, una situación que repercutió en que el titular de dicha cartera ministerial, decidiera cerrar la puerta al mercado brasileño de carne bovina y que a lo largo de todo el país se intensificaran las salidas a terreno para verificar in situ la calidad de los productos.
En este contexto, el Seremi Pedro Lagos señaló que se requisará cualquier tipo de carne que les genere un grado de sospecha.
El Secretario Regional Ministerial, además, explicó la complejidad que significa determinar el origen de cada producto, esto pues, muchas de las carnes exportadas a Chile se reparten sin contener información alguna de su lugar de producción.
Finalmente el Seremi de Salud se refirió a la fiscalización realizada en la comuna de Vallenar, en donde se requisó más de cien kilos de carne por encontrarse en mal estado.
Cabe señalar que desde el Ministerio de Salud se intensificó un programa de fiscalización de supermercados y frigoríficos de la región, el que se encuentra en pleno desarrollo y se extenderá hasta el próximo viernes. Todos los productos requisados en este proceso serán desechados de forma inmediata.