Al iniciar este 2021, desde el Partido Humanista (PH) realizaron un balance de lo que el 2020 significó para el país y los desafíos que se avecinan en adelante. Su presidenta, Catalina Valenzuela, sostuvo que los sentimientos son encontrados: “por un lado una sensación de que hay tanto por hacer, tanta injusticia acumulada y situaciones que no han sido resueltas y siguen abiertas”.
En esa línea, puntualizó que los temas que preocupan son cómo se desarrollará el proceso constituyente y cómo afrontar la crisis económica que se aproxima. Además, cuestionó la capacidad del Gobierno para enfrentar la pandemia y evitar más muertes si continúa sin darle prioridad a criterios sanitarios a la hora de la toma de decisiones.
“El PH ha sido un partido que ha logrado posicionarse potentemente, donde la gente ha reconocido una forma diferente de hacer política, ha reconocido los valores de la coherencia, de poner al ser humano como valor central como algo significativo y que hace una gran distancia entre esto y la política general”, señaló.
Prueba de esto, afirmó, “es el increíble posicionamiento con que termina nuestra diputada Pamela Jiles”, quien fue reconocida como personaje público positivo del año con el 23,9% de las menciones espontáneas en el último estudio de Pulso Ciudadano.
“Si bien es cierto que puede haber gente que esté a favor o en contra de su estilo, siendo honestas y honestos, sabemos que la gestión que impulsó nuestra diputada está permitiendo a muchos terminar este año en este país, sabiendo que pudieron rescatar, en la necesidad más extrema, esos fondos supuestamente ahorrados para su pensión”, destacó Valenzuela.
Así, expresó que “su presencia como una carta presidencial ha emergido desde la ciudadanía y como Partido no nos queda nada más que decir, la ciudadanía manda. Estamos en un momento de cambio, seguimos en esta disposición de ofrendar lo que tengamos para dar y si esa es la pelea que tendremos que dar para el otro año, estaremos dispuestos”.
Para el vicepresidente del Partido Humanista, Claudio Ojeda, el año fue “de dulce y agraz”. Desde el punto de vista político, expresó, “hemos visto la inoperancia de Piñera que no ha estado a la altura de darle respuesta a las grandes necesidades que tiene el pueblo chileno; y de una clase política que una vez más ha querido revivir muertos para reinstalarlo en la esfera política creyendo que el pueblo está dormido”.
Por otra parte, destacó la valoración ciudadana a Florcita Alarcón y Pamela Jiles, quien ha aparecido entre los principales nombres para una eventual carrera presidencial. “Eso nos llena de mucho orgullo porque creemos que el futuro chileno es naranja, es humanista, es feminista, es de pueblos originarios, es de las necesidades básicas de la gente, es de la voz del pueblo que se empieza a acercar al poder”.