Mauricio Oviedo evalúa los avances en materia jurídico-ambiental, de la mano de las instituciones.
Creado hace solo tres años, el Primer Tribunal Ambiental (1TA) cumple un rol como órgano jurisdiccional especial, autónomo e independiente, que tiene como misión resolver las controversias medioambientales de su competencia y ocuparse de los demás asuntos que la ley somete a su conocimiento.
El 1TA tiene jurisdicción en las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Atacama y Coquimbo. Está constituido como un órgano colegiado mixto, vale decir, compuesto por ministros abogados y licenciados en ciencias. Lo integran tres ministros titulares, dos de ellos abogados, y un profesional del área de las ciencias; además de contar con dos ministros suplentes: un ministro abogado y un ministro científico.
MINERÍA CHILENA conversó con el Ministro presidente Primer Tribunal Ambiental, Mauricio Oviedo, quien evalúa el rol del organismo como institución jurídica medioambiental. Asimismo, aborda casos en materia de minería, algunos de ellos emblemáticos como el de Pascua-Lama, donde el 1TA determinó recientemente su cierre definitivo.
Mejora continua
¿Cómo evalúa el desempeño y evolución que ha tenido el Tribunal Ambiental en este tiempo, así como su rol en el marco de la institucionalidad ambiental?
Nuestro principal desafío ha sido situar en el territorio jurisdiccional las discusiones de índole jurídica ambiental, lo que significa ejercer de la mejor manera en la macro-zona norte una justicia ambiental cercana y oportuna.