Dos productores de aceite de oliva del Valle de Huasco son reconocidos a través de Guía Oliva 2020 como los 10 mejores aceites de oliva a nivel nacional, en donde además cinco productores fueron catalogados con aceites de excelente calidad. Trabajo que ha ido de la mano con el apoyo del Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA Intihuasi a través del Grupo de Transferencia Tecnológica (GTT) Denominación de Origen del Valle de Huasco, el cual es liderado por la ingeniera en alimentos Verónica Arancibia.
Verónica Arancibia extensionista de INIA Intihuasi, quien forma parte del Área de Alimentos del Futuro del INIA, señaló que “la participación en el concurso Guía Oliva permite conocer la calidad de los aceites de oliva producidos en el país, donde en una primera instancia, los aceites son evaluados por el único panel de cata con certificación COI (Consejo Oleícola Internacional) en Chile, y luego de pasan a una evaluación más bien descriptiva de los atributos y notas de cada aceite para así entregar sugerencias de consumo. Nos llena de orgullo que un productor nuevo en la producción de aceite de oliva, que ha incorporado paquetes tecnológicos INIA, integrante de uno de nuestros GTT haya sido premiado como el “Aceite Revelación”, fruto de un arduo y esforzado trabajo familiar. Por otra parte, otro de los premiados es un productor de aceite de oliva con tradición olivícola que dentro del GTT es un agricultor referente que ha mantenido la calidad a lo largo del tiempo y una vez más obtiene un reconocimiento”.
Con mucho orgullo los productores recibieron el premio a través de una nueva versión on-line de Guía Oliva 2020. Por tres años Carmen Castillo, hoy ganadora de la mención “Aceite Relevación” junto a su familia ha trabajado en la producción de aceite de oliva extra virgen, técnicas de manejo del suelo, poda, post cosecha, trabajo que ha sido guiado por equipo de profesionales del Centro Experimental INIA Huasco “ahora estamos como emprendimiento familiar produciendo aceite de oliva extra virgen, con características organolépticas que son únicas del valle. El INIA ha sido un tremendo aporte porque nos apoyó desde la materia prima, desde los inicios cuando recién comenzamos, seguimos con las accesorias técnicas de INIA que son súper importantes en el uso y manejo de la maquinaria donde realizamos transferencia con los funcionarios de INIA que llevan años trabajando, ha sido una experiencia muy positiva contar con el apoyo de INIA”.
Hace 20 años Robinson González se ha dedicado a la producción de aceite de oliva “hemos caminado junto con el INIA me he desarrollado en el aceite de Olivia con nuevas variedades tradicionales caminar junto al INIA estos 20 años ha sido muy provechoso, no solamente para mí, sino que para todos los agricultores del Valle de Huasco”.
A través del Grupo de Transferencia Tecnológico de INIA se busca entregar herramientas técnicas a productores olivícolas del Valle de Huasco para hacer uso de la Denominación de Origen del aceite de oliva a un plazo de tres años. Hoy se ven los frutos al ser reconocidos a nivel nacional por su calidad de producción, por tener un sabor que caracteriza la zona.
Edgardo Díaz director regional de INIA Intihuasi agregó “ INIA tienen una larga data en el apoyo al sector olivícola de la Provincia de Huasco, la cual posee una importante historia centenaria que valoramos y trabajamos para potenciar, hoy esta historia convive con una nueva savia, nuevos productores de aceite de oliva de calidad excepcional que con la extensión, la transferencia de conocimientos y protocolos agronómicos específicos, pueden aprovechar el potencial de calidad que ofrece este privilegiado valle nortino, así seguiremos apoyando a nuestros productores con investigación y desarrollo e innovación, desde nuestro Centro Experimental Huasco”.
Acerca de INIA
El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) es la principal institución de investigación, desarrollo e innovación agroalimentaria de Chile. Vinculada al Ministerio de Agricultura, cuenta con presencia nacional y un equipo de trabajo de más de 1.000 personas altamente calificadas. Ejecuta al año un promedio de 400 proyectos en torno a 5 áreas estratégicas: Cambio Climático, Sustentabilidad, Alimentos del Futuro, Tecnologías Emergentes, y Extensión y Formación de Capacidades. Estas iniciativas contribuyen al desarrollo agroalimentario sostenible del país, creando valor y proponiendo soluciones innovadoras a los agricultores, socios estratégicos y la sociedad, generando una rentabilidad social que varía entre 15% y 25%, por cada peso invertido en cada uno de sus proyectos.