En un documento de seis páginas, la bancada UDI -junto a la Fundación Jaime Guzmán- impulsan medidas paralelas en el Congreso para mejorar las pensiones de forma inmediata y, dicen, no esperar un próximo gobierno ni una nueva Constitución. Además de ese retiro de pensiones, proponen incentivos para las empresas que contraten adultos mayores.
Una minuta de seis páginas ha venido trabajando la bancada de la UDI -junto a la Fundación Jaime Guzmán- para hacer una propuesta legislativa en torno a una reforma de pensiones.
El tema sigue siendo uno de los pendientes “prioritarios” del sector, sobre todo luego de que en julio pasado se aprobara el retiro anticipado de fondos del 10%, debate que mostró al oficialismo dividido y sufriendo una de sus derrotas políticas más significativas de los últimos años.
En Chile Vamos, además, afirman que una de las necesidades que nombran los ciudadanos en distintos sondeos para cambiar la Constitución es mejorar las pensiones. Y añaden que, ante la negativa de la oposición de tramitar el proyecto de ley del gobierno, insistirán en legislar por “cuerdas separadas” el tema en iniciativas que combatan las “inequidades” del sistema de hoy.
En el texto se señala en su ítem de “declaración política” que, lo relevante, es mejorar las pensiones de las mujeres y de la clase media media. Eso, señalan, “requiere del mayor esfuerzo fiscal posible”.
“La solidaridad debe provenir de un mayor esfuerzo fiscal, gradual y responsable y no mediante un impuesto al trabajo”, se afirma en el texto.
Además, proponen que, para mejorar las pensiones de clase media y vulnerable, el pilar solidario se extienda y se establezcan “premios” por años de cotización. “Debe existir una pensión mínima garantizada igual o superior al salario mínimo para todos aquellos jubilados que hayan cotizado permanentemente durante su vida laboral”, se agrega.
El diputado Gustavo Sanhueza, también promotor de las iniciativas, sostiene que lo central es que el partido busca reafirmar su compromiso con dos principios básicos: que “los ahorros previsionales son de los cotizantes y nunca del Estado” y, en segundo lugar, que “la libertad de las personas para elegir quién administra sus fondos”. Y agrega: “Estamos viendo cómo paulatinamente hay un ánimo confiscatorio a los fondos de pensiones por parte de la izquierda, al estilo ‘quita’ argentino y ello sería un verdadero manotazo del Estado al futuro de los jubilados de nuestro país. Las jubilaciones deben ser financiadas por el Estado y no imponer un impuesto al trabajo de los más jóvenes”.
Retiro de fondos al jubilar
La UDI hace una propuesta de siete puntos o temas para abordar en iniciativas legislativas: reorganización del Pilar Solidario, retiro de fondos, retraso edad de jubilación (con dos planteamientos), pensión de sobrevivencia y herencia, tablas de mortalidad y mercado de trabajo.
Respecto a la reorganización del Pilar Solidario, los diputados proponen avanzar hacia una “Pensión Básica Garantizada, que sea un piso mínimo de seguridad social para todos los jubilados de Chile”. Y añaden: “En el corto plazo, se debe realizar una ampliación del Pilar Solidario, para incorporar a la clase media en los beneficios del Estado. Además, se debe establecer una bonificación por años cotizados, con la finalidad de premiar e incentivar la cotización. La solidaridad en materia previsional se debe hacer con recursos públicos”.
Sobre el retiro de fondos, la propuesta es concisa: “Con la finalidad de reafirmar el derecho de propiedad sobre los fondos, incentivar la cotización y el retraso de la edad de jubilación, se propone permitir el retiro de $2 millones de pesos al jubilar y de $5 millones para aquellas personas que retrasen su edad de jubilación en un año”.
Este planteamiento, además, busca ser complementado con el proyecto de ley de retirar el 50% de los fondos acumulados con posterioridad a la edad legal de jubilación.
Incentivar con tributos a empresas que contraten adultos mayores
En tercer punto, en torno a la edad de jubilación, plantean “fijar el monto del Aporte Previsional Solidario al cumplir la edad legal de jubilación y no al momento de jubilarse”. Eso, dicen, incentivará a permanecer en el “mercado del trabajo”.
La segunda propuesta sobre la edad de jubilación los diputados recalcan que hoy no existen incentivos para alargar la permanencia en el mundo laboral, por lo que los diputados impulsan la “creación de un estatuto laboral para el adulto mayor”, que, dicen, permitiría “dar flexibilidades para su mantención en el mundo laboral”. Los parlamentarios también proponen “incentivar tributariamente a las empresas que mantengan y/o contraten adultos mayores, con la finalidad de alinear incentivos y generar nuevos puestos de trabajo para el adulto mayor”.
En un quinto punto, la UDI impulsa que el cónyuge del pensionado -una vez fallecido- opte qué hacer con el dinero restante de la jubilación: si se convierten en la pensión de sobrevivencia o que los fondos sean parte de la herencia, y se entreguen de una sola vez a los herederos del pensionado, y no en modalidad de pensión. Hoy solo se entregan en modo de “pensión de sobrevivencia”.
Como sexta propuesta, abordan cambios a la tabla de mortalidad e impulsan que enfermos terminales puedan retirar sus fondos como excedentes de libre disposición.
En último punto, los diputados piden avanzar “decididamente” en el proyecto de ley de sala cuna universal, pues, dicen, “permitirá generar incentivos para la incorporación al mercado del trabajo de mujeres y jóvenes, produciendo un efecto importante para su futuro previsional”.