El Servicio Agrícola y Ganadero, SAG, realizó una reunión informativa con la Asociación de Productores y Exportadores Frutícolas del Valle de Copiapó, APECO, a raíz de la reciente detección de un foco de la plaga Lobesia botrana (polilla del racimo de la vid) en un predio de uva de mesa ubicado en la salida norte de Copiapó, sector Bodega.
En el encuentro, al que asistieron representantes de diversas empresas agrícolas de la zona, encabezadas por la presidenta de la agrupación, Lina Arrieta, se informó que a raíz de lo anterior se generó un área de reglamentación en un radio de 3 kilómetros a la redonda, desde el punto donde fueron hallados los insectos (dos ejemplares adultos).
En una reunión sostenida con los productores que están dentro de esta área, encargados de la oficina Copiapó del SAG, explicaron las obligaciones a las que están sujetos, dando énfasis al cumplimiento de medidas de mitigación, y en especial de control fitosanitario por parte de las empresas ubicadas dentro de los primeros 500 metros desde el punto de detección.
Así mismo, los productores cercanos al punto de hallazgo tienen la obligación de realizar aplicaciones de larvicidas autorizados por el Servicio, las que buscan eliminar posibles estados inmaduros del insecto. Todos estos requisitos legales están determinados por el Programa de Control Oficial de Lobesia botrana. El SAG notificó de estas medidas a las agrícolas del sector y a las plantas frigoríficas.
Al respecto, el director regional del SAG, Juan Carlos Valencia, destacó que la detección del foco “genera restricciones de exportación a determinados mercados, como Corea, Canadá o México, entre otros destinos, mientras no se registren nuevos hallazgos por un periodo determinado”.
“Creemos que estas polillas son vehiculizadas por transportes de carga o insumos agrícolas que vienen desde la zona central del país, donde la plaga todavía está establecida, por lo que siempre llamamos al sector al autocuidado, de manera de prevenir la entrada de ejemplares adultos a la región”, estimó la autoridad.
Cabe destacar, que esta es la segunda área reglamentada decretada en la región, considerando que aun se mantienen las restricciones en una primera zona que abarca parte del sector urbano de Copiapó.