Parlamentaria solicita aclarar reclamos por alumnos que no estarían recibiendo el beneficio, e instructivo de establecimientos que señalan que por indicaciones del organismo se llama a retirarlos por orden de llegada y hasta terminar existencias, lo que “se presta para aglomeraciones y exponer a contagios”, declaró la legisladora.
La diputada (PS) por Atacama, Daniella Cicardini solicitó el envío de oficios de fiscalización de la Cámara de Diputados, dirigidos a la dirección nacional y regional de la Junta de Auxilio Escolar y Becas, Junaeb, a fin de aclarar el contenido de instructivos de establecimientos de Copiapó en los que, según se señala por indicaciones de la propia Junaeb, se llama a padres y apoderados a efectuar el retiro de canastas individuales del programa de alimentación del organismo “por orden de llegada y hasta agotar stock”.
La parlamentaria señaló al respecto que “efectivamente hemos recibido estas denuncias y me preocupa particularmente aclarar lo que se señala en estos instructivos, en el sentido que por instrucciones de Junaeb la entrega de estas ayudas se realiza haciendo llamados a las familias y alumnos a retirarlas hasta agotar stock”.
“Como si se tratase de verdaderos ofertones, e ignorando que esto además de desorden puede generar prácticamente una verdadera competencia, que no solo pasa a llevar la dignidad de las personas, y deja afuera a estudiantes con derecho a recibir este beneficio, sino que puede generar aglomeraciones innecesarias que ponen en riesgo la salud de los padres y apoderados, de los estudiantes y de todo el personal presente durante las entregas en los recintos”, enfatizó Cicardini.
Asimismo la legisladora indicó que “este reclamo va de la mano y en gran medida se explica con la otra queja que nos han hecho llegar padres y alumnos, en el sentido de que no se estaría haciendo entrega de la ayuda suficiente ni en los plazos indicados”.
“Los apoderados nos señalan que esto tiene que ver con que la mercadería recibida por las empresas concesionarias y responsables de la distribución en los colegios estaría incompleta, y que cuando se les ha consultado a los encargados de Junaeb, ellos señalan que lo faltante será entregado en otra oportunidad, lo que hasta ahora no habría sucedido porque se han seguido repitiendo esta entrega de ayudas hasta agotar stock “.
En esa línea, la parlamentaria agregó que “esa misma precariedad se presta para esta modalidad que me parece insólita, y que a todas luces induce a que no se respeten las condiciones mínimas de distanciamiento social y de prevención sanitaria requeridas por la pandemia para proteger a los apoderados y estudiantes, y sería aún peor y más grave si es que esto efectivamente se hace siguiendo indicaciones de la propia Junaeb”.
Debido a la situación, la parlamentaria llamó a realizar las correcciones necesarias, informando las fechas de las siguientes entregas a los establecimientos con la mayor antelación posible, y con el total de los beneficios para una adecuada repartición por cada alumno o alumna beneficiario, y teniendo en consideración las medidas preventivas por el estado de catástrofe declarado en el territorio nacional producto de la pandemia del virus COVID 19.
Aunque la legisladora indicó que se encuentran recabando antecedentes sobre si estas situaciones se han repetido en otros puntos de Atacama, entre los reclamos recibidos por la parlamentaria al menos en lo relativo a entregas insuficientes se encuentran los de estudiantes de escuelas de enseñanza básica de Copiapó como la Escuela Pedro León Gallo, Abraham Sepúlveda, San Pedro, Luis Cruz Martínez, José Manso de Velasco, El Chañar, Escuela Palomar, Isabel Peña Morales y Hernán Márquez Huerta.
En tanto, dentro de los establecimientos de Educación Media en los que han existido reparos por la entrega a estudiantes del Instituto Comercial, Liceo Tecnológico, Liceo José Antonio Carvajal, Liceo Palomar, Liceo Mercedes Fritis, Liceo Fernando Ariztía de Paipote y Liceo de Música.