La Policía de Investigaciones de Atacama, ha logrado la detención de 56 personas por infracción al artículo 318 del Código Penal, en el marco de las fiscalizaciones durante el toque de queda que rige a nivel nacional y que es controlado por detectives y otras instituciones, en las tres provincias de la Región, contribuyendo así a la mantención de las medidas de confinamiento ordenadas por el gobierno.
A nivel nacional, durante el primer mes del Servicio COVID-19, se han registrado 37.827 controles de identidad, que han permitido detectar 565 infractores del toque de queda, pero además detener a 1.527 personas por hechos constitutivos de delito.
En Atacama se ha logrado la detención flagrante de personas, que al momento de la fiscalización han sido sorprendidos cometiendo delitos flagrantes o con órdenes de detención pendientes. En relación a este punto el Jefe de la Brigada de Robos (BIRO) subprefecto Guillermo Namor señaló «hemos detenido a personas que presentan ordenes pendientes por diversos delitos y a personas que han eludido los controles policiales y militares que se están realizando para el correcto funcionamiento de esta actividad. Hemos detenido a personas que portan elementos para cometer el delito de robo y también a sujetos que nos han indicado nombres falsos porque presentan requerimientos judiciales y por tal motivo han sido detenidos y puestos a disposición de los tribunales respectivos».
Asimismo, el subprefecto Namor indicó que si no existe ningún fundamento válido o un caso de emergencia para salir, las personas deben permanecer en su domicilios ya que, según explicó, hay una obligación legal para la policía de detener a quienes no cumplan con estas disposiciones impuestas por la autoridad, «lo primero es la salud de las personas y es un bien que debe ser protegido» finalizó.
El personal institucional de la PDI de Atacama, también se ha sumado a fiscalizaciones determinadas por el jefe de la Defensa y coordinadas con el Servicio de Salud Regional, en puntos como ferias, terminales de buses, farmacias, hoteles sanitarios, supermercados y además realizando controles vehiculares en puntos estratégicos para detectar a quienes, durante el fin de semana, quieran hacer uso de sus segundas viviendas.