Funcionarios del establecimiento asisten de manera presencial a los hogares de los estudiantes, tal como ocurre en todos los establecimientos rurales del territorio Huasco, reforzando la importancia del apoyo de las familias en este contexto.
Distante alrededor de 90 km al norte de Huasco, se encuentra ubicada la Escuela Moisés López Trujillo de localidad de Canto del Agua, la cual alberga 14 niños y niñas de esa localidad y también del sector de Llanos de Largarto. Como un objetivo primordial del establecimiento frente al receso escolar por el Covid-19, ha sido incentivar el trabajo en familia y que los apoderados se involucren en los aprendizajes de sus niños y niñas.
Para el profesor encargado de la Escuela Moisés López Trujillo, Eduardo Rodríguez Poyanco, “este proceso ha sido de aprendizaje y también ha sido la oportunidad de reinventarnos como profesores, ya que las familias de nuestra localidad están en desventaja en comparación a las familias urbanas, distantes unas de otras y debíamos intencionar el trabajo con ellos” agrega en el contexto de la suspensión de clases presenciales.
La manera de comunicarse con los estudiantes y sus familias ha hecho que “todas las semanas asista el equipo de profesionales a hacer entrega de material pedagógico impreso y también a retirar los trabajos ya realizados por los los y las estudiantes, donde también se les entregan recomendaciones a los apoderados para que apoyen a sus hijos”, afirmó el profesor.
Esta oportunidad se utiliza también, para poder tener conocer la situación de la familia, incluso se les ha entregado estímulos tanto a estudiantes, como apoderados, que han trabajado arduamente y con responsabilidad en este periodo.
Cabe destacar que los estudiantes también recibieron las canastas y útiles escolares entregados por Junaeb y el Servicio Local de Educación Pública –SLEP- Huasco.