La autoridad expresó que esta iniciativa es “un apoyo, un alivio y una nueva esperanza para casi 700 mil trabajadores de Chile, por cierto de Atacama”.
Tras valorar la promulgación de la ley que crea el Ingreso Mínimo Garantizado, la Secretaría Regional Ministerial de Gobierno María Francisca Plaza Velis, explico en detalle los alcances de esta iniciativa que fue impulsada por el Presidente Sebastián Piñera
La autoridad comenzó declarando que “esta iniciativa, en definitiva, crea un subsidio que complementa el ingreso de los trabajadores de menores ingresos, y que puede llegar hasta $59.200 para quienes ganaban el salario mínimo ($301.000) en el mes de febrero”.
“Es sin lugar a dudas, un beneficio directo para los trabajadores de menores remuneraciones. El subsidio va directo al bolsillo de los trabajadores, no es imponible y asegura que se alcance un ingreso líquido de al menos $300.000. Esto representa un aumento del ingreso líquido de hasta un 25% respecto al salario mínimo que estaba vigente en febrero, en base al cual se pagará el primer mes del beneficio, y de hasta un 18% respecto al salario mínimo vigente desde marzo”, agregó la autoridad.
Además, la Seremi de Gobierno aprovechó la instancia para precisar que este apoyo “si se extiende de manera decreciente a aquellos que reciben hasta $384.363 por su trabajo al mes. Esta iniciativa beneficiará a 670 mil trabajadores, de los cuales más de la mitad son mujeres, cerca del 80% forma parte del 60% más vulnerable y dos tercios viven en regiones”.
El subsidio se comenzará a pagar en mayo y tendrá un costo fiscal de cerca de US$200 millones en 2020.
El ingreso mínimo garantizado se suma a las acciones desplegadas por el Gobierno, como la ley de protección del empleo y los ingresos, para apoyar a las familias frente a los desafíos generados por la pandemia mundial de coronavirus.
Para concluir, Plaza Velis dijo que “a pesar de la adversidad, la inquietudes, los problemas y la presencia del Covid-19, como Gobierno creemos que si actuamos todos en equipo y me refiero al sector público, privado, la academia y la ciencia, pero por sobre todas las cosas, la comunidad, vamos a salir adelante. Estamos pasando por tiempos difíciles y abril representará probablemente el mayor desafío sanitario que haya enfrentado nuestra región en su historia. Por lo tanto, no tengo dudas, que actuamos con unidad, disciplina y generosidad, juntos y unidos superaremos esta crisis”.