Desde el Ministerio de Minería hay preocupación por la rapidez con que avanza la iniciativa, presentada en moción parlamentaria, que busca proteger a los glaciares.
Una creciente preocupación hay en el gobierno, específicamente en el Ministerio de Minería, por el avance que está teniendo en el Congreso -con la redacción actual- una moción parlamentaria que tiene por objetivo crear un marco de protección a los glaciares, iniciativa presentada por los senadores Guido Girardi, Ximena Órdenes e Isabel Allende.
¿La razón? Fundamentalmente, la rigidez que estiman que tiene esta propuesta. Según Minería, la discusión actual debiese orientarse en los aspectos técnicos de la propuesta, además de considerar definiciones reconocidas internacionalmente sobre la materia.
Otra preocupación, sienten en el Ejecutivo, es que se debe revisar la retroactividad propuesta, “ya que hoy existen proyectos que cuentan con su Resolución de Calificación Ambiental (RCA) y que están operando y cumpliendo altos estándares ambientales. Por lo tanto, no se justificaría un cierre que, además, produciría más de 22 mil puestos de trabajo”, explicaron desde esa cartera.
Por último, destacaron que el proyecto incluye la figura de delito ambiental, lo que ya está considerado en otro proyecto de ley que está en trámite en el Congreso. Por eso, advierten en el gobierno, es necesario aclarar este punto para evitar una sobrerregulación.
El subsecretario de Minería, Pablo Terrazas, comentó que en su visión, es posible avanzar en una regulación basada en aspectos técnicos y, al mismo tiempo, resguardar los recursos naturales.
“Para avanzar hacia una minería más sustentable, la discusión se debe basar en aspectos técnicos, de tal manera de poder de seguir desarrollándonos como país, y al mismo tiempo, resguardar nuestros recursos naturales como son los glaciares”, sostuvo Terrazas.
Indicaciones
En este contexto, el Ejecutivo está evaluando presentar indicaciones al proyecto, respecto de lo cual, la próxima semana se determinará el plazo para presentarlas en el Senado. Y aunque, formalmente, el ministerio explica que está recién analizando la posibilidad de presentar indicaciones, es un hecho que está desarrollando un estudio con este fin.
Según trascendió, uno de los puntos que se estaría estudiando en el Ejecutivo es modificar el mecanismo de evaluación ambiental de estos proyectos, eliminando el concepto de compensación del daño ambiental cuando se trate de la afectación de un glaciar. Esto, porque la visión que existe en el gobierno es que, ya que lo que busca el proyecto es evitar dañar los glaciares, si esto se consigue no sería necesario compensar ningún daño.
En la cartera de Minería también advierten que este proyecto podría no solo perjudicar a la industria minera, sino también los pasos fronterizos hacia Argentina, líneas de transmisión eléctrica, embalses, concesiones de pesca en la zona austral del país y otros. En efecto, sería un problema país al involucrar al menos más de tres sectores económicos.
Al respecto, el Ministerio de Economía también está trabajando en un estudio para revisar estos posibles impactos a otras actividades no mineras.
La postura del Instituto Libertad y Desarrollo, en tanto, es similar a la del gobierno. En un documento, sostuvo que el proyecto de ley tiene problemas conceptuales y legales. A su juicio, “pone en riesgo las reglas del juego en materia de certeza jurídica para la inversión, al paralizar los proyectos en curso a la espera de permisos no requeridos al inicio del proyecto y que, de aprobarse la moción parlamentaria, no se podrían otorgar”. Agregaron que la moción excluye toda actividad productiva en la alta montaña, limita actividades no dañinas para los glaciares e impone exigencias de procesos medioambientales que recargan el aparato administrativo.
En tanto, el senador Guido Girardi dijo que en este debate parlamentario “vamos a ver cuál es el verdadero compromiso del gobierno con la COP25 y el cambio climático”. En relación a las indicaciones que presentaría el gobierno, señaló que si estas van con el sentido de resguardar los glaciares, no habría problema, pero que si va en el sentido contrario y a “defender los bolsillos de las utilidades de las mineras”, se va a votar en contra. “Esta es la típica campaña del terror que han hecho siempre. Hay que resaltar la incoherencia del gobierno”. Por último, sostuvo que en Chile sí se puede hacer buena minería sin destruir glaciares.